Un Fa Mayor para el asombro
y la aventura.
Un verano en tonalidad de Do Mayor,
con Sol dominante.
Al niño interior se lo recuerda
en Mi menor.
O en Re menor, cuando se llega a la vejez.
En La Mayor suena el Amor.
Se modula a La Sostenido, para que dure.
Cuando termina, suena un Si disminuido.